General Director (GIA)

Después de todo el esfuerzo detrás de la Reforma Energética las expectativas siempre han sido muy altas, desafortunadamente y puede que en el peor momento para México el precio del petróleo está sufriendo uno de los bajos más inesperados hace poco tiempo, el precio empieza a subir pero se mantiene un clima de incertidumbre. ¿Cree que esto va a desmotivar a las empresas en su inversión o consideras que es el momento justo para que México empuje hacia la creación de un sector energético competitivo y atractivo para la inversión extranjera? 

GIA es una empresa que tradicionalmente no estaba en el sector de la energía, nuestro enfoque ha sido el ser una constructora líder. Esta es una empresa que nació como constructora de proyectos “llave en mano” es decir, incluir toda la serie de servicios desde ingeniería, pasando por la construcción, hasta el financiamiento. El modelo encajó “como anillo al dedo” ya que tenemos el instinto y la capacidad para llevar a cabo estos proyectos.

GIA es una empresa que piensa diferente, no nos comparamos con nuestra competencia porque nos gusta salir de categorías. Cada año tomamos un tema diferente para mostrar las actividades que hacemos en GIA y hacemos un evento enfocado hacia nuestros inversionistas y empleados. Actuamos diferente y utilizamos nuestro propio benchmarking fuera de las empresas del sector, queremos hacer las cosas diferentes.

Nuestro activo más valioso es nuestra gente, sin duda con el crecimiento orgánico hemos invertido en activos que producen proyectos hasta dentro de 25 años pero el activo más valioso son nuestros trabajadores,  nos preocupamos por su motivación y tenemos un esquema de participación activa de los directivos en toda campaña, cosa que en México no es tan usual como en otros países. No somos los más grandes ni queremos serlo, estamos centrados en hacer proyectos selectivos de manera rentable y eficaz.

Se abren nuevas oportunidades y GIA está reaccionando, el entorno nos dice que con un precio bajo del crudo, la inversión puede verse desmotivada; pero una inversión petrolera de mil millones de dólares para hacer una perforación de gran tamaño es una inversión para muchos años, con lo cual, también podemos ver esta coyuntura como una oportunidad.

La construcción social y la infraestructura son un índice del desarrollo económico de un país, con reformas como la Energética se da un nuevo paso en el desarrollo del territorio nacional. ¿Cree que el gobierno está dando los pasos adecuados para el apoyo y desarrollo del sector de la construcción?

La voluntad es clara, pero es cierto que el precio del petróleo y aunque nuestra economía no dependa 100% de estos ingresos, es una de las principales fuentes de ingreso del gobierno, la industria de la construcción está sufriendo recortes en este momento, pero la voluntad existe y los proyectos han sido expuestos. Si bien el gobierno por este hecho no está apoyando el sector opino que es algo coyuntural, conforme la situación económica vaya mejorando el sector mejorará.

Los efectos de las reformas no son de un día para otro, pero se puede percibir cierto aumento en la actividad; en particular GIA tomó la decisión de asociarse con la mejor empresa que conocemos en construcción de energía en el mundo, Kiewit, el tercer constructor más grande de los EE.UU y el primero en temas de energía. Nuestra alianza tiene un impacto positivo en nuestro posicionamiento en la reforma energética.

Desde el 2013 y por tres años consecutivos GIA obtuvo un reconocimiento como una de las Mejores Empresas Mexicanas (otorgado por Banamex-Citi, Deloitte y el ITESM) por haber destacado en prácticas de negocio. ¿Cómo han conseguido este éxito? ¿Qué prácticas de negocio distinguen a GIA de otras empresas constructoras exitosas en su modelo?

Insisto en el capital humano, nuestro activo más importante es la gente, cada año todos los miembros de dirección tenemos un viaje de sesión de negocios e invitamos a nuestras esposas para fomentar el ámbito familiar y las relaciones entre trabajadores. El año pasado fuimos a Silicon Valley; visitamos Apple, Microsoft entre otras empresas para conocer  más cerca su modelo, estamos muy abiertos a innovar.

Esta política se refleja en nuestros proyectos y los clientes lo perciben, la demanda de la industria es discreta y la selección de los proyectos ha de ser exhaustiva para que nuestro modelo se sostenga en calidad, las decisiones que tomamos son de largo plazo.

GIA opta por administrar varios proyectos en diferentes líneas de la construcción, por ejemplo en 2011 consiguen gestionar en un solo año 70 proyectos. ¿Quieren ser reconocidos como la constructora con un amplio abanico de posibilidades o se centrarán en modelos más especializados con la reforma?¿Cuales de entre todos sus proyectos actuales se podría destacar  por su complejidad o  envergadura?

En la actualidad, el 50% de los ingresos de GIA son concesiones y su operación. Hace 8 años nos pusimos esa meta y lo hemos conseguido, el motivo de esta decisión es porque son flujos consistentes, ya programados. Este tipo de proyectos están garantizados por 25 años.

En México tenemos dos proyectos en proceso, un hospital y una carretera (que es la primera que operamos con riesgo aforo). Este es el tipo de proyectos que nos interesan; si bien hemos buscado también diversificar nuestro portfolio, lo hemos hecho con pasos seguros y sólidos.

GIA tiene una amplia experiencia en la línea de infraestructuras y servicios de construcción (construcción, infraestructura, desarrollo inmobiliario y energía), ¿Cuál es la ventaja competitiva que le permitirá a GIA establecerse en el mercado energético?

Por ahora nuestra apuesta está basada en la alianza con Kiewit; ha construido 5 veces más MW que CFE en toda su historia, es uno de los compradores más grandes de Caterpillar y GE; además es interesante saber que los propios empleados son dueños de la empresa.

Ese es el tipo de estructura que GIA también comparte, la promoción interna para el crecimiento orgánico, grandes constructoras mexicanas han crecido de esta manera.

Además del energético GIA participa en otros mercados positivamente impactados por la reforma. Houston (Texas) es el ejemplo perfecto del impacto que el sector energético puede tener en la demanda inmobiliaria: GIA está presente en el 40% del mercado de adecuación de interiores además de la edificación de oficinas. ¿Qué medidas tomará Usted para que GIA se posicione ante esta gran oportunidad y amplíe su actual cuota de mercado?

La división inmobiliaria es un éxito en GIA, de hecho tenemos una carencia de recurso humano en ingeniería inmobiliaria. Ahora mismo estamos reclutando a ingenieros para el sector inmobiliario, se requiere de un set de habilidades muy específico.

Una de las posibilidades que estamos evaluando en cuanto a la formación del personal conjuntamente con la Escuela de Ingeniería, es la Universidad GIA. Es un sistema en línea de capacitación para que todos las nuevos empleados que están entrando en la compañía y los presentes puedan crecer en su formación.

El Gobierno Federal está destinando un amplio presupuesto para mejorar la conectividad y calidad de las infraestructuras del país, con algunos proyectos estrella. Sin embargo, ustedes compiten en dichas licitaciones con empresas con una extensa trayectoria como ICA o Coconal, por ejemplo. ¿De qué manera espera Usted ganarse la confianza y hacer ver que GIA es la opción que mejores resultados puede garantizar?

La infraestructura de transporte es un camino que hemos trabajado poco a poco durante 6 años. Hoy GIA ya es un jugador en la construcción de carreteras. En temas de transporte, hemos participado en un gran número de participaciones.

En las grandes licitaciones del gobierno nos ha tocado hacer alianzas, tenemos experiencia con empresas españolas en este sentido; ejemplos son el hospital de Ixtapaluca, el hospital de Chile…

GIA está teniendo un performance destacable en los mercados financieros. ¿Hasta dónde tiene potencial de crecimiento su acción en la Bolsa? ¿Cuáles son los elementos que los inversores tendrían que conocer de manera más urgente para confiar en GIA en el mercado bursátil?

La próxima semana vamos a hacer una emisión de 5 mil millones de pesos en el mercado de valores, “bursatilizar” los valores de uno de nuestros proyectos. Se trata de un refinanciamiento de la deuda primaria que adquirimos con la banca. Este financiamiento nos permitirá crecer en el sector energético y los proyectos que ya tenemos en expansión internacional.

Es la segunda emisión que realizaremos. La primera fue el primer PPS hospitalario que se hizo en este país: El hospital ya estaba operando y fue una operación muy exitosa. Esperamos que esta segunda la sea también, el sector financiero y la comunidad de inversionistas nos conoce, son varios los bancos que quieren trabajar con nosotros. Como corporativo podemos esperar a convertirnos en empresa pública.

Como Usted sabe, HBR es un medio de líderes y de cómo estos se enfrentan a retos en el día a día de la gestión de la empresa. Usted conoce extensamente el sector de la construcción en México. ¿Cual es su consejo para un buen management en un sector tan altamente competitivo como este?

Es difícil hablar de uno mismo. Tuve la oportunidad de hacer una maestría en Harvard y trabajé un año para una empresa Japonesa en Tokio. Más tarde trabajé como presidente de una compañía americana en México y trabajé en ICA. De esta forma he tenido la posibilidad de ver un gran espectro. Por eso me gusta poder combinar mi experiencia y hallar nuevas formas de hacer las cosas, la innovación es clave. Hay que buscar que se está haciendo en el exterior, no sólo en esta industria pero en otras también. Tengo un gran COO que me permite pensar en la estrategia global y sin embargo también me sirve el control de la empresa vía cash flow.

Todas las semanas tenemos una reunión con los directores y analizo los ingresos de cada contrato, el cash hay que estudiarlo semanalmente en esta industria. Eso me permite hacer una inmersión del proyecto y tener una mayor perspectiva.

Dejo que los empleados tengan la posibilidad de tomar decisiones, pero siempre con un monitoreo suficiente; mi rol debe ser el rumbo hacia donde dirigir la empresa.

Con esta visión, ¿Qué es lo que los lectores pueden esperar de GIA a medio plazo?

Estamos atravesando un momento difícil, el cliente más importante, que es el gobierno, está pasando un momento complicado, nosotros tenemos que ser habilitadores para apoyar a la recuperación de los sectores, somos conscientes de que viene una gran oportunidad dado que el presupuesto federal se reduce, vemos una oportunidad ahí donde el gobierno no pueda financiar un proyecto, nosotros podemos absorber esa demanda y ofrecer una solución.